Me duele la vida

Mi mamá murió hace casi dos meses. Padecía de Alzhaimer desde hace años .El Alzhaimer, acaba con quien la padece y con la familia, se lleva lo más preciado, nuestros recuerdos.
Mamá que Dios nunca me quite el tuyo... te amo.

"Me duele la vida_, me decias madre.
Y cómo a mí me dolía."

Tus ojos manoseaban en los míos,

buscando algún recuerdo para anclarte.

Tus manos alargándose,

buscando la tibieza de la cercanía

para quedarte

así... juntito mío.

Y me dolía madre,

me dolía no poder contigo,

con tus olvidos.


Abandonada de motivos tu,

huérfana -yo de ti-.

Te dedicaste a pintar de grises

tus cabellos,

a improvisar el nombre de las cosas.

Hasta te olvidaste de tí y de mí.


Cuando había un rayito de luz en tu memoria,

me decias: "me duele la vida hija".

Y a mí, cómo me dolía.

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Trozos

¿En qué ausencia te quedaste?
¿En qué recuerdo?

Tal vez en los papalotes de mi pueblo,
o en la guayabera blanca de mi padre,
en los ojos que aún me buscan de mi madre,
con Don Nacho, el Sr. De las paletas a la salida
del colegio.

En los zapatos negros de charlón recién boleados,
en los jeans luidos con garabatos pintados,
en el club con tres ladrillos de los niños de mi cuadra,
en la soga colgada del árbol del jardín.

En mi matatena roja,
con mis zapatillas de “sueños bailarina”.
En mi diario y aquélla pluma verde,
en el avioncito pintado en mi cochera.

Junto a don Neto el tendero de la esquina que era mi amigo,
con Marilú mi muñeca negra,

En qué ausencia te quedaste niña?
En qué recuerdo?

El miedo

El miedo, es más que un rasguño.
Es la trepanación de la calma,
el desflore de lo sereno,
la mácula del seso, que abierto….
flota hacia tu inconciente
haciendo de -EL- su casa.
Habitándote todos tus inviernos.

Te absuelvo de mi,
de mi desgracia a amar tan azuladamente.

Te eximo
de ése latido acelerado
de ésa ráfaga
del látigo.

Te libro
para que si tu quieres
me ames libremente.

Te absuelvo del amor
a “cortapisa”
a cambio ofrezco -sin condiciones-:
“el no ofrecimiento“.

Será así que el amor libra y libera,
y por ello redime y equilibra.
¿Y por que no?, tal vez con suerte
también transforme.

Y me quite el azul
y me haga luz cristalina.
Y entonces sí….